¿Cuánto sueño extra puede hacer una diferencia en la depresión adolescente?
Un nuevo estudio encuentra una relación entre las horas de inicio retrasado en la escuela y un mejor estado de ánimo y el sueño en los adolescentes.
El estudio, publicado en la revista Journal of Developmental & Behavioral Pediatrics, retrasó el tiempo de despertarse de los adolescentes en un internado por tan sólo 25 minutos ( Boergers et al., 2013 ).
Encontraron que el número de estudiantes que reciben más de 8 horas de sueño en una noche saltó del 18% al 44%.
Además de esto, los estudiantes experimentaron menos somnolencia diurna , estaban menos deprimidos, y usaron menos cafeína.
Como era de esperar, los estudiantes que se beneficiaron más fueron los que estaban más privados de sueño al inicio del estudio.
El autor principal, Julie Boergers, un experto en sueño, dijo:
«La falta de sueño es una epidemia entre los adolescentes, con impactos potencialmente graves sobre la salud mental y física, la seguridad y el aprendizaje. Horas de inicio demasiado temprano de la escuela secundaria contribuyen a este problema. La mayoría de los adolescentes experimentan a un cambio biológico que retrasa el ciclo de sueño-vigilia, necesitan levantarse más tarde, lo que puede hacer de la escuela que comienza temprano una verdadera dificultad. En este estudio, se analizó si un retraso temporal relativamente modesto, en el tiempo de inicio de la escuela cambiaría los patrones de sueño de los estudiantes, la somnolencia, el estado de ánimo y el consumo de cafeína «.
La razón por la que la mayoría de los adolescentes están privados de sueño es que necesitan dormir más que los adultos, pero a menudo no lo entienden.
A diferencia de los adultos, los adolescentes necesitan 8.5 a 9.5 horas de sueño por noche.
Las escuelas secundarias de Estados Unidos por lo general comienzan a las 8 am y a la mayoría de los adolescentes les resulta difícil conciliar el sueño antes de 11pm, simplemente no hay suficientes horas en la noche.
Julie Boergers sigue:
«Los resultados de este estudio se suman a un creciente cuerpo de investigaciones que demuestran los beneficios de salud importantes de la escuela que retrasa las horas de inicio de clases de los adolescentes. Si alineamos más de cerca los horarios escolares con los ritmos circadianos de los adolescentes y las necesidades de sueño, vamos a tener que los estudiantes que están más alerta, más felices, mejor preparados para aprender, y no dependen de las bebidas con cafeína y energisantes sólo para mantenerse despierto en clase «.
Esto está lejos de ser el primer estudio en sugerir que la escuela comienza muy temprano tiene consecuencias adversas.
Otros han encontrado vínculos entre los tiempos de inicio tempranp y el rendimiento académico, la reducción del estado de ánimo bajo (como en este estudio) y aún más, los accidentes automovilísticos.
La evidencia parece abrumadora, pero comenzar más tarde las clases sigue siendo controvertido.
Una queja común es que si comienza más tarde queda menos tiempo para actividades extracurriculares.
Sin embargo, no hubo evidencia de esto en el presente estudio, con los estudiantes que participan en deportes y otras actividades. Usan la misma cantidad de tiempo que antes.
Además, en vez de estar exhaustos a la noche, tenían más energía para completar su tarea.