¿Qué es el pensamiento o modelo sistémico?
Es un modelo para pensar, una herramienta para organizar las descripciones de nuestras experiencias. Nos ofrece herramientas para organizar las descripciones de nuestra experiencia y que nos permita intervenir en el funcionamiento de una organización para crearla, mantenerla, corregirla, ampliarla.
 
El sistema es un conjunto de elementos y de relaciones entre ellos y entre sus atributos; los elementos son las partes del sistema, los atributos son las propiedades de esos elementos y las relaciones los mantienen unidos.
 
¿Qué aplicación tiene el pensamiento sistémico en las organizaciones?
Había una vez cinco ciegos, donde cada uno estaba tocando una parte diferente de un elefante (cola, cabeza, pata, trompa, panza). Cada uno describió y definió al elefante de acuerdo a su punto de vista, es decir, a la parte que cada uno estaba tocando. Los ciegos estuvieron discutiendo todo el día, sin ponerse de acuerdo, y cada uno se fuera a su casa pensando en que los otros estaban equivocados.
Este ejemplo se repite en muchas empresas u organizaciones, ya que generalmente están ordenadas por áreas, departamentos o secciones que dependen de diferentes gerentes. Cada uno cree que su lugar es el lugar por el cual pasan las cuestiones trascendentes, cualquier cuestionamiento a esa premisa no es tomada como otro punto de vista del cual se puede aprender, sino como una negación de sí mismo y por lo tanto los otros son estúpidos, enfermos o malos.
Pensar si técnicamente es saber que cuando uno está participando en una actividad, está formando parte de un proceso más amplio que lo influye y al cual influye.
 
¿Como se piensa sistemicamente?
Es pensar globalmente y actual localmente. Pensar sistemicamente es pensar en círculos, en conexiones, que pudieran ir entre sucesos aparentemente aislados entre si en el tiempo y espacio. Para pensar sistemicamente hay q tener en cuenta la secuencia de los fenómenos.
Es saber que cuando uno esta participando en un sistema esta formando parte de un proceso mas amplio que lo influye y a la cual influye.
Frente a un hecho cualquiera, pienso en qué cosas pasaron antes, qué cosas pasaron después, qué cosas pasaron simultáneamente, no para saber la causa del fenómeno sino para saber cómo es que ese suceso tuvo lugar. Hablamos de multicausalidad. Podemos comprender y explicar muchos sucesos en la medida en que ampliamos nuestro margen de observaciones hasta incluir el contexto en el que dicho fenómeno tiene lugar.
 
¿Cómo se amplía la mirada?
Ampliando el campo de observación y ubicando los hechos en el contexto en el que suceden. Un ejemplo en una empresa sería:
En una casa de electrodomésticos se quería promocionar y vender más un lavarropas de la marca B, ya que éste daba más ganancias al negocio. Por lo tanto se les dio a los empleados la directiva de ofrecer primero este producto a sus clientes en caso de duda. En el primer mes las ventas del lavarropas marca A subieron y los de la marca B bajaron. Los directivos decidieron hacer publicidad en los medios sobre el lavarropas marca B y además brindaron una capacitación a los empleados sobre este. En el segundo mes las ventas del lavarropas marca A siguieron subiendo y las del B bajaron.
Un día el gerente preguntó a uno de sus empleados porque no se vendían los lavarropas de la marca B, éste le respondió que él sacaba más comisiones vendiendo el producto de la marca A.
 
Cada vez disponemos de más información, pero de menos asesoramiento sobre lo que es útil. Sin poder discernir, cada vez más información nos confunde.
El pensamiento sistémico es un método de identificar algunas reglas, algunas series de patrones y sucesos para prepararnos de cara al futuro e influir sobre él en alguna medida, nos aporta cierto control.
 
Ventajas del pensamiento sistémico:
– Permite el análisis de los acontecimientos en función de múltiples causalidades
– Proporcionar métodos más eficaces para afrontar los problemas mediante estrategias de pensamiento o modifican de pensamiento que los origina.
– Acaba con la actitud de esfuerzo permanente, ya que resolver un problema es cómo empujar una puerta que está atascada para descubrir que se abre tirando de ella.
– Es la base de un razonamiento claro y una buena comunicación, una forma de profundizar y ampliar nuestro punto de vista.
– Permite superar la tendencia a culpar a los demás.
– Es un instrumento fundamental para guiarse a uno mismo y dirigir a otros con eficacia.

Autor: Eduardo Montoro

Mi nombre es Eduardo Montoro, soy del 68, estoy casado con Graciela y tengo un hijo, Juan Manuel.
Tengo un largo recorrido académico, definido por un amigo como el viaje de Frodo, no porque sea como Frodo, sino por las peripecias que tuve que pasar, algunas en Italia otras en Argentina. En ese viaje obtuve varios reconocimientos académicos:
• Licenciado en Psicologia, Universidad Católica de Cuyo.
• Master en Psicología de Counselling, Università Europea di Roma
• Profesor de Psicología, Universidad de Mendoza
• Licenciado en Filosofía Sistemática con orientación Lexicográfica, Pontificia Università Gregoriana
• Licenciado en Filosofía del Derecho, Universidad Católica de Cuyo
• Y cuatro años de Teología, no acreditados oficialmente en ninguna universidad, pero que equivalen a una licencia.
Actualmente resido en San Juan, Argentina y mi hobby es salir a andar en moto en duro por los cerros sanjuaninos.
Pero lo que más me apasiona es ver crecer a las personas, superarse, en las más difíciles e inimaginables circunstancias.

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