EL DERECHO A RECHAZAR TRATAMIENTOS FISICOS DE LOS PROBLEMAS `PSICOLÓGICOS’
Los tratamientos físicos —la lobotomía, la leucotomía, el electro-shock y la psicofarmacología, inclusive— parten de una concepción del malestar que la mayoría de los psicólogos no aceptaría. Estos tratamientos son empleados cuando los psicólogos son incapaces de tratar el caso y lo delegan en los médicos, quienes conocen aún menos la psique humana. Además de no abordar las «causas» de los problemas psicológicos, los tratamientos suelen deteriorar los procesos mentales. En ocasiones, el uso de fármacos estabiliza a las personas y les permite tranquilizarse para poder reflexionar sobre su situación. No obstante, estos tratamientos nunca son «psicológicos», y los profesionales y usuarios de los servicios psicológicos deberían movilizarse para rechazarlos?.