SE TOMAN DECISIONES SOBRE LA INTEGRACIÓN DE LOS MENORES EN LA FAMILIA
La evaluación de «riesgo» se realiza supuestamente para proteger al menor, a pesar de basarse en ideas normativas sobre lo que es y no es una familia feliz saludable. Por tanto, la psicología forense se entremezcla con la psicología del desarrollo y la educación para determinar los grados de criminalidad e identificar a las partes culpables. Es así que los niveles de «apego» de la madre soltera hacia su hijo o hija (como se desprende de los trabajos de Bowlby y han contrastado los estudios con animales no humanos) entran a formar parte de la ecuación a partir de la supuesta evidencia «científica» aportada por las imágenes de las resonancias magnéticas funcionales (IRME) de estas pobres criaturas inadecuadas en donde se aprecian las partes del cerebro que deberían estar iluminadas y no lo están39.
Esta lógica de integración se complementa con prácticas que pretenden identificar y «reinsertar» a los que han trasgredido las normas de un grupo o de una «comunidad». De este modo, los intentos de propiciar la «reconciliación» entre los infractores y las víctimas son psicologizados, generándose la expectativa de que los arrepentidos de sus crímenes se avergüencen de algún modo». Por ejemplo, en las
LA PSICOLOGÍA COMO IDEOLOGÍA
estrategias de la «vergüenza reintegradora» habituales entre algunos criminólogos, la persona que se «avergüenza» permite reforzar concepciones dominantes sobre las emociones inapropiadas y los sentimientos normales».