EN RESPUESTA AL ‘TERRORISMO’, LA PSICOLOGÍA APELA A SU PROPIA NOCIÓN DE COMUNIDAD
La respuesta de la Asociación Americana de Psicología (APA) al
-S (el ataque al World Trade Centre el 11 de septiembre de
o(Di) es un ejemplo esclarecedor de la visión del mundo de los psicólogos cuando se enfrenta a una amenaza extrema. Tras los ataques y desde su cargo como presidente de la APA, Zimbardo, muy conocido por el estudio sobre la prisión de Stanford, instó a los psicólogos a que dejaran al margen sus diferencias y que aunaran esfuerzos con el fin de enfrentarse a este enemigo común que incluía lo que denominó «los cultos del odio»39. Parece que ahora la idea de que la comunidad de psicólogos debería llegar a una solución y hacer piña ante una amenaza común es considerada de manera positiva.
Cuando otras personas ajenas a la psicología se reúnen en un grupo, son motivo de sospecha y se las considera propensas a crear cualquier tipo de problema —que va desde el «pensamiento grupal» al «cambio arriesgado»40, salvo en las ocasiones en que trabajan juntas en una «comunidad» bajo un propósito común—. La imagen acogedora y confortable de la «comunidad» evoca los valores democráticos y amigables aprobados por los psicólogos estadounidenses. Pero la existencia de una excepción resulta menos agradable: cuando las personas de otras culturas, susceptibles de mostrar una cierta hostilidad hacia la «democracia» Occidental, se reúnen en una comunidad, la vieja sospecha psicológica de que cualquier agrupación que exceda el típico ideal individual resulta peligrosa irrumpe de nuevo. Cuando esas comunidades incluyen grupos muy unidos e inaccesibles para los desconocidos, la situación empeora en lo que respecta a los psicólogos, al considerarlas como potenciales desencadenantes de
LA PSICOLOGÍA COMO IDEOLOGÍA
movimientos de «culto» o «sectas». Observamos, pues, cómo los supuestos racistas que plagan a la psicología blanca occidental afloran ante la amenaza de Occidente, facilitando a su vez que las categorías de antaño empleadas para patologizar a otras culturas con una organización distinta tomen nuevos bríos.