LA PSICOLOGÍA REGULA LA REPRODUCCIÓN DEL TRABAJO FUERA DEL ÁMBITO LABORAL
Además de disociar lo físico de lo intelectual, otra característica del trabajo promovida por la psicología en el ámbito de la actividad intelectual pasa por la separación entre el «trabajo instrumental» y el «trabajo emocional». El trabajo instrumental es la
LA PSICOLOGÍA COMO IDEOLOGÍA
parte racional y ordenada del trabajo intelectual destinada a una tarea específica. Por su parte, el trabajo emocional está más relacionado con los sentimientos y las relaciones experimentadas en el cuerpo, incluso si éste es considerado como si fuera parte del trabajo «intelectual». No obstante, los psicólogos académicos continúan debatiéndose acerca de las conexión entre la «motivación», la «emoción» y el comportamiento observable, por lo que permanecen atrapados en categorías producidas en condiciones de vida alienantes6.
La separación del trabajo intelectual en trabajo instrumental y emocional ha cobrado una creciente relevancia en el proceso de producción y reproducción, que mantiene unida a la sociedad capitalista económica y políticamente. En este sentido, la psicología llegar a ser realmente ella misma al reconfigurarse en la disciplina especializada en las actividades intelectuales y, por tanto, en el modo en que los seres humanos alcanzan un equilibrio vital entre los aspectos emocionales y los racionales. Por ende, la idea dominante que plantea que el mundo de los sentimientos y de las relaciones juega un papel más importante en las vidas de las mujeres otorga, una vez más, un papel destacado a la psicología en la regulación de la vida familiar y laboral. De esta manera, los psicólogos, interesados en hallar un «equilibrio» entre la vida personal y la vida laboral, analizan detalladamente el rol de las mujeres como cuidadoras7.