LOS MODELOS DEL DESARROLLO ASUMEN UNA CORRESPONDENCIA ENTRE LA EDAD ADULTA Y LA CIVILIZACIÓN
La psicología ha jugado un papel destacado en el colonialismo. Cuando los europeos construyeron modelos de «desarrollo» (o evolutivos), no era de extrañar que el desarrollo de los individuos se trazara en función del desarrollo de las naciones. Por ejemplo, la secuencia de edades y etapas en las explicaciones evolutivas de Jean Piaget privilegiaba a las personas más «civili7adas» y asumía que los estadios superiores de desarrollo cognitivo —los de las «operaciones formales»— serían obtenidos con mayor facilidad por los suizos36. En este campo de la psicología del desarrollo (o psicología evolutiva) apreciamos una línea divisoria entre los investigadores identificados con la tradición piagetiana y los partidarios del psicólogo ruso LevVygotsky.
Piaget era un socialista cristiano que trabajaba en Ginebra y Vygotsky un marxista que investigaba en Rusia en los tiempos posteriores a la revolución. Por tanto, los partidarios de cada una de estas teorías del desarrollo han intentado interpretar los trabajos de ambos desde una lectura política progresista de sus influencias37.
LA PSICOLOGÍA COMO IDEOLOGÍA
Por ejemplo, el problema para los que pretenden que la psicología del desarrollo pueda ser progresista es que la obra de Piaget únicamente acepta una lectura progresista en su faceta de «epistemólogo genético» (un filósofo interesado en el modo que aprendemos acerca del mundo) en lugar de psicólogo. Sólo cuando consideramos su trabajo desde la psicología del desarrollo, apreciamos la normalización de ciertos tipos de desarrollo y la patologización de aquellos otros que no se adecuan al modelo. Lo mismo sucede con Vygotsky. A pesar de plantear cuestiones interesantes acerca de la relación entre el pensamiento y el lenguaje, su trabajo sobre el desarrollo psicológico todavía formaba parte de un proceso de patologización de las personas consideradas menos civilizadas que las que vivían en el corazón de Rusia38.
A este respecto, la psicología como disciplina comete los mismos errores que la antropología, los cuales serían amplificados por los programas estatales imperialistas de observación y control de la población «nativa» en ultramar y de los que actualmente muchos antropólogos intentan echar tierra de por medio. Utilizando un símil podríamos afirmar que si la antropología social «fue la criada del colonialismo», la psicología transcultural es hoy en día «el sirviente fiel del colonialismo»39. Fuera de Occidente los estudios acerca de la mentalidad fueron utilizados para confirmar la naturaleza «infantil» de los que, supuestamente, eran menos civilizados. Asimismo, el impacto colonial de identificar el desarrollo de los individuos con el desarrollo de las naciones quedaría patente en la investigación psicológica que consideró a los «nativos» africanos como menos desarrollados. Como veremos a continuación, las intenciones políticas de estos métodos psicológicos en desarrollo estuvieron deliberadamente centradas en la disciplina del trabajo y de la productividad».